Temporada de reproducción y anidación de cocodrilos en Quintana Roo

 

En México tenemos tres especies de cocodrilianos: el cocodrilo de pantano (Crocodylus moreletii), el cocodrilo de río (Crocodylus acutus) y el caimán (Caiman crocodilus); de las 23 que están distribuidas en el mundo. Los cocodrilos son animales de hábitos nocturnos, especialmente en cuánto a su alimentación. Suelen salir al sol para termoregulrarse en horas donde hay una mayor incidencia solar y miden entre los 3 a 4 metros de largo, pero se han encontrado ejemplares de 7.5 metros.

Los cocodrilos adultos son territoriales, únicamente en temporada de reproducción comparten espacios pequeños, sobre todo machos con hembras. La temporada de cortejo y apareamiento de los cocodrilos ocurre entre los meses de marzo a agosto. Los cocodrilos son polígamos, la relación entre machos dominantes y hembras es de un macho por cada 3-5 hembras. Dos o tres semanas antes anidar, la hembra sale a explorar el sitio y provece a cavar para poder depositar los huevos; esto sucede a finales de marzo y principios de abril.

En la época de anidación depositan entre 30 y 40 huevos, sin embargo, solo un porcentaje muy bajo de ellos logra eclosionar y llegar a la vida adulta; por lo que es considerada una especie protegida. El periodo de incubación de estos huevos es de entre 75 y 80 días. La mayoría de los huevos se pierden debido a que las hembras anidan entre las hojas de manglar y las aves se alimentan de ellos, al igual que de las crías recién nacidas.

Los cocodrilos fungen como depredador selectivo por encontrarse en la parte más alta de la cadena de alimentación. Esto permite que controle otras poblaciones de animales en su entorno además del reciclado de nutrientes más importantes en el ambiente. Tienen hábitos cavadores, forman canales y reservorios de agua en la época de sequía que sirven de refugio a aves acuáticas y otros animales asociados al agua. Con estos hábitos pueden hacer cuevas en la orilla de los cuerpos de agua en que viven y su función es darles refugio y sitios para almacenar alimentos.
Tienen cuatro tipos de alimentación: los cocodrilos jóvenes se alimentan a base de insectos, crías de peces y renacuajos. Conforme van creciendo consumen insectos más grandes, peces medianos, ranas, tortugas pequeñas, aves, cangrejos, camarones y mamíferos pequeños. Cuando llegan a la etapa adulta su dieta es prácticamente piscívora.

Los cocodrilos son amenazados por diferentes factores que afectan su hábitat, entre ellos la contaminación por escurrimiento de combustibles, las lanchas, los motores de las lanchas que pueden golpear sus lomos y provocarles fuertes heridas, además de la fragmentación de su hábitat y la fuerte contaminación ambiental propiciada por el hombre y sus desechos. Otro factor de riesgo es su captura clandestina por el comercio ilegal de sus pieles.

Es importante respetar su hábitat y tomar medidas para conservar estas especies en peligro. La temporada de reproducción y anidación de los cocodrilos en Quintana Roo nos ofrece una ventana para comprender mejor su ciclo de vida y los desafíos que enfrentan en un mundo cada vez más dominado por la actividad humana.

Al comprender la importancia de estos reptiles y los peligros que enfrentan, podemos tomar medidas para proteger su entorno y asegurar su supervivencia a largo plazo. Respetar su hábitat y promover prácticas de conservación son pasos fundamentales para garantizar que las generaciones futuras también puedan disfrutar de la presencia de estos fascinantes animales en la naturaleza de Quintana Roo y más allá.