La cocina mexicana no solo es famosa mundialmente, es extensa y es un reflejo fiel de la idiosincrasia nacional. No es de extrañar que dentro de las variadas opciones que ofrece aparezcan platillos con nombres peculiares que merecen ser explicados. Estamos hablando de las enchiladas suizas, que nada tienen de suizas, y la torta cubana que no es la misma que se creó en Florida, EE.UU.
Todo parece indicar que las enchiladas suizas se crearon durante los inicios de una famosa cadena de restaurantes mexicana. A un chef se le ocurrió ponerle crema a la salsa verde de unas enchiladas y queso por encima. Al ver esta creación, el dueño de la cadena, el Sr. Sanborn, comentó que el platillo le recordaba al paisaje nevado de los Alpes suizos… y el nombre prevaleció.
Por otro lado, la torta cubana nació en la calle de Cuba, en el centro de la Ciudad de México y es una celebración de la carne de puerco ya que contiene jamón, chorizo, pierna de cerdo, queso de puerco y otras cosas de cerdo, aunque su consumo se ha extendido por todo el país por lo que se le han agregado ingredientes pero el principio es el mismo: una gran cantidad de cerdo.