Solsticio de verano maya

Llegó el verano, la estación favorita para quienes vivimos en el hemisferio norte, ya que la llegada del verano representa la llegada del sol, del clima cálido y, por supuesto, de las esperadas vacaciones de verano. Esta época es la oportunidad perfecta para escaparnos a la playa para disfrutar del sol, y qué mejor opción que disfrutar de unas vacaciones de verano en Cancún o en la Riviera Maya.

Esta estación llega con el solsticio de verano que ocurre entre los días 20 y 21 de junio, o mes Xul en el calendario Haab de los mayas. El solsticio de verano 2021 tendrá lugar el domingo 20 de junio. Pero, más allá de la llegada de las vacaciones de verano, ¿sabes qué significaba el solsticio de verano para los antiguos mayas? Como bien sabemos, los mayas fueron grandes astrónomos y sus estudios se enfocaban principalmente en los movimientos del Sol, mismos que siguen vigentes hasta la actualidad y continúan sorprendiendo a los científicos.

Uno de los grandes descubrimientos en el mundo de los mayas en el campo de la astronomía fue el solsticio de verano (Saq’ Q’ij en maya), el cual interpretaban como el día de la quietud del Sol, en el que “se detiene” para darnos el año más largo del año (N’imla’j o Nim Up’am Q’ij en maya), porque recordemos que el día en que tiene lugar el solsticio de verano, el día tiene más horas de luz solar. Además, lo veían como un momento mágico de purificación, abundancia, fertilidad y juventud.

Es por ello por lo que las comunidades mayas llevan a cabo ceremonias para obtener las bondades que llegan con este día, como la ceremonia de la plegaria de Saq’ Q’ij, la cual consiste en, de ser posible, mirar al sol por un breve instante, posteriormente, bajar la cabeza y recitar una plegaria, seguido de un ritual en el que se besan las puntas de los dedos y se elevan las manos hacia el sol para bendecirlo y besarlo de forma simbólica. También existe la costumbre de, al atardecer, subir a las montañas o ir a la orilla del mar para mirar directamente al sol y hablar con él hasta que desaparezca.

Nuestros antepasados mayas dejaron un increíble legado en la precisión arquitectónica de sus edificaciones, ya que, durante cada solsticio, el templo de Kukulkán ofrece un juego de luces y sombras que, según la leyenda, representan la división del templo por obra del dios maya del sol, Kin, para anunciar la llegada del día más largo del año.